Yuukan Dojo cumple su primer año en nueva casa

Sebastián Esparza

Desde que era chico siempre tuve tendencia a ganar peso con facilidad, siempre fui el gordito del aula, eso me llevo a no disfrutar de los deportes en la niñez y genero rechazo por ellos mediante crecia, cuando me veia obligado a hacer educación física o actividad semejante siempre me desanimaba y lo hacía a desgano sintiéndome observado y juzgado por mis compañeros. Paralelamente siempre me llamaron la atención las artes marciales, apoyado por mi viejo hice varios intentos; shotokan y kung fu, pero siempre termine dejándolo.
Hoy a mis 30 practico Kyokushin, empecé hace casi un año en un dojo que ni siquiera tenia nombre aún, avanzada la clase no podía completar varios de los ejercicios, ahi me di cuenta del tiempo que perdí, y de que con los dolores que experimentaba pagaba en cuotas los años en los que no demostré la disciplina suficiente. Mas o menos en Mayo de este año, realizamos un ejercicio para ganar aire y vencer la fatiga durante un combate, mientras mi Sensei y mis compañeros me alentaban lo completé… pude sentir un verdadero avance en mi práctica; esto trascendió cualquier enseñanza filosofica o compleja, ame sentirme fuerte, seguro de mí mismo, me sentí apoyado por gente buena que comparte el mismo gusto que yo, me divertí, me sentí bien… y sigo haciéndolo.
Alejandro Spampinato
De mi entrenamiento de karate destaco lo que mejoré en éste tiempo, cuando empecé no podía pegar ni una patada y hoy veo una mejoría completa y la posibilidad de seguir avanzando. Me gusta ser parte de la familia que es el Shinkyokushin, en especial nuestro dojo. Sensei Daniela siempre está metiéndole onda a las clases y empeño para enseñar. Por más que siempre se ve gente ir y venir al igual que en todas las actividades, las compañeros de siempre estamos y sabemos como funciona el otro por lo cual el entrenamiento es cada vez mejor. Y cuando comienza alguien nuevo y se prende de verdad al estilo y hace crecer el dojo es genial.
Me encanta el arte del karate y el ritual de ir a las clases, me gustó ya volver al dojo con un cinturón nuevo y ver los frutos del esfuerzo y entrenamiento. Veo los frutos de lo que hacemos en el dojo en el día a día en la vida cotidiana, la verdad salir transpirado, cansado y golpeado de una clase dura en el dojo no tiene precio para mí.
Maru Ortega

yo no estoy hace mucho, pero cosas relevantes que me acuerde fueron:

*cuando Ale participo en el torneo, porque creo que para algunos fue el primero que fuímos a ver y para mí fue la 1era vez que fui a keiko.
*el tema de que no se divida en grupos por la antigüedad o la edad sino que sea un trabajo homogéneo
*cuando se entrena los sábados u otros días
*cuando nos mudamos de gimnasio, el grupo se empequeñeció y después creció.

FELIZ CUMPLEAÑOS YUUKAN DOJO!!!!

OSSU!!!!

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